Opinión de "Gris era el Páramo"

 

Esta ha sido mi primera novela de fantasía oscura y quizá no ha sido la entrada más suave al género que podía tener, ni tampoco creo que se convierte en mi tipo de fantasía favorito, pero, al menos, admito que ha sido interesante entrar en un mundo tan gris (en sentido figurado y literal, además) y unos personajes moralmente cuestionables (aunque, teniendo en cuenta el tipo de mundo en el que viven, no sé hasta qué punto es posible tener moral). Si bien tengo mis peros, me ha gustado leer algo diferente a lo que estoy acostumbrada y, ahora que he tenido un poco de tiempo para reflexionar, me gustaría mucho conocer el resto de la historia.

Sinopsis

En un mundo dominado por los tonos grises y sin otro paisaje más allá de montañas y el infinito Páramo, Nyx, una joven asesina, está decidida a conseguir su libertad a cualquier precio, aunque ello implique estar al servicio de un hombre al que detesta y al que percibe como uno más que pretende encadenarla y usarla para su propio beneficio. Sin embargo, hasta que no aprenda a usar sus poderes de caminante, la capacidad de entrar y salir de la Umbra, un mundo superpuesto al suyo, no tendrá la oportunidad de escapar por sí misma.

Por otro lado, Lem es un augur incapaz de ver el futuro a pesar de haber sido anunciado como hijo de la Aullante, en otras palabras, un impostor. Convencido de que lo matarán si lo descubren y asfixiado por la tediosa Academia y su trato abusivo, busca desesperado un modo de escapar, pese a que el único modo de hacerlo es usar a los demás y ser usado.

Y, mientras tanto, Maia y Wylar, guerreros al servicio de la Princesa, investigan en el Páramo el motivo por el que la guarnición de la frontera ha dejado de enviar informes. Nadie cree en los rumores que anuncian una nueva Oleada, pero ni ellos pueden negar los extraños acontecimientos que se suceden conforme se acercan a su objetivo.

Un mundo en blanco y negro

El mundo es tal vez lo que más me ha gustado, tan diferente de cualquier obra de fantasía que haya leído y es especialmente llamativo que no tengo colores más allá del blanco y negro con su paleta de grises. La inmensa mayoría de lugares que se presentan parecen estar en mitad de un desierto, con pueblos compuestos de casas irregulares y amontonadas unas sobre otras, sucios y más o menos abarrotados de gente que, según mi impresión, solo se preocupa de mejorar su propia calidad de vida sea como sea. En otras palabras, es un mundo hostil en el que no parece haber lugar para la moral tal y como nosotros la entendemos.

Por otra parte, está la magia, presente en parte de la población, asociada a las dioses y a la Umbra, un lugar que describen como el inframundo y que se halla presente en el mismo mundo solo que en un plano diferente, por lo que, para aquellos que pueden ver en ella, aparecen de repente edificaciones, grietas e incluso criaturas que no existen en el mundo de los personajes. Además, los colores se invierten en la Umbra (el negro pasa a ser blanco y viceversa) y las caras de las personas se retuercen en máscaras grotescas. Existen diferentes dones, Nyx es una rareza al ser capaz de entrar y salir a placer de este plano, otros son capaces de ver el inframundo pero no de entrar en él, otros pueden detectar al resto que tiene estos poderes y, algunos, de anularlos.

Todavía no hay muchos detalles sobre las criaturas que aparecen (aunque yo tengo mis teorías), tal vez la más familiar sean los Grises, similares a una especie de zombies, pese a que mi favorita son los Arcontes, que me recuerdan mucho a los monstruos de Lovecraft.

Personajes tan grises como su mundo

Como he dicho, estamos en un mundo muy hostil donde no parece que haya lugar para los personajes "buenos", sin embargo, por esta misma razón tampoco podemos entrar en el concepto de personajes "malos". Todo el mundo se mueve por su propio interés y poco importan los asesinatos, las traiciones y cómo usar a los demás. En este sentido, yo no llegué a empatizar demasiado con ningún personaje (lo que se traduce en que no me importaba mucho si alguno moría por el camino), pero es emocionante ver qué decisiones toman con tal de sobrevivir o llegar a su objetivo.

En el caso de Nyx, la mayoría de las veces no disfruta matando, pero sí parece gustarle la sensación de ganar más poder por sí misma y su forma de solucionar cualquier problema suele ser mediante las amenazas o la violencia. Hasta cierto punto, es comprensible ya que lo único que parece querer es vivir sin un amo y por su cuenta, sin compañía; deja claro que su impresión de la gente es que todo el mundo va a querer usar su poder y esclavizarla si puede, por lo que prefiere no tener que tratar con nadie. En ese sentido, me parece un personaje muy coherente consigo mismo y no especialmente cruel teniendo en cuenta las circunstancias.

Por otro lado, Lem es el que más contradicción me ha generado y sus partes son las que me han costado más de leer. Pienso que está muy bien hecho y tal vez es el más interesante, teniendo en cuenta que tiene el perfil del chico larguirucho y sin talento del que abusa todo el mundo, tartamudo y sin poder alguno para enfrentarse a los demás; sin embargo, su gusto por la sangre, la disección y la tortura de otros le da un punto espeluznante en el que yo no sabía si me daba pena o habría preferido mantenerlo a una distancia prudente. Igual que con Nyx, es comprensible su odio y desprecio hacia la Academia y la gente de su entorno, pero sus fantasías tan detalladas son inquietantes y me hicieron pensar que tal vez no tendría suficiente con una venganza personal, a diferencia de Nyx.

También debo decir que sus partes probablemente me resultaron más tediosas por el ambiente en el que está sumergido la Academia. Es tediosa, propicia el abuso y un sistema de poder entre los augures, por no hablar de que tiene toda la pinta que se cimienta sobre mentiras para mantener a unos cuantos en una situación favorable sobre el resto. La verdad es que a mí también me darían ganas de quemarla con todo el mundo dentro, eso no se lo puede reprochar a Lem.

Por último, tenemos a Maia y Wylar, el alivio cómico de la novela... durante una parte. Luego, las cosas se complican. Maia es tal vez el personaje más honorable teniendo en cuenta que se preocupa de verdad por Wylar y trata de que sobreviva, en contraste con lo bravucona que puede ser y lo mucho que le gusta presumir de su fuerza, pero es militar por vocación y se ciñe a su misión pese a que no tiene buena pinta en determinado punto. Wylar, por el contrario, es soldado para vivir de algo y él mismo sabe que no tiene madera para serlo, más de una vez se plantea abandonar y buscar una vida más fácil. Aun así, es el personaje con el que más he podido empatizar ya que su reacción eran las mismas que las que yo iba pensando mientras leía: "Un agujero en el suelo donde se ven cosas que se mueven. ¿Sabes qué no me apetece? Entrar ahí". Le cogí cariño al final y no puedo culparlo por querer salir corriendo todo el rato, teniendo en cuenta los bichos con los que se van encontrando (bastante tiempo aguantó, si queréis mi opinión).

Kasidra merece una mención de honor por ser el personaje más simpático y misterioso. Una anciana con la capacidad física de un chaval de veinticinco y con una mochila repleta de artilugios, entre ellos, un bastón que lanza rayos, siempre es divertido. Además, se agradece que, en un mundo como este, sea la única optimista, siempre sonriente y educada hasta rozar la burla; por no decir que tiene algunos comentarios que hacen referencia a nuestro mundo, lo que plantea teorías interesantes como si en realidad estamos presenciando nuestro mundo tras algún tipo de apocalipsis o existe otro plano en el que exista. Sea como sea, es el personaje más entrañable de la novela y con el que mejor lo he pasado leyendo.

Ritmo y dificultad

Iré directa al grano: la novela requiere un esfuerzo por parte del lector para comprender el mundo y cómo funciona. Siempre tenéis disponible un glosario al final del libro que puede ayudaros a orientaros con los nombres, pero igualmente necesitaréis poner de vuestra parte para unir unas cuantas piezas, por lo que no lo recomiendo a menos que seáis lectores de nivel medio o avanzado.

El ritmo puede parecer lento en algunos puntos, pero yo lo aprecio en el sentido que me da tiempo a asimilar el mundo y la magia que me presenta y su funcionamiento. Es cierto que hubo partes (las de Lem, especialmente) que se me hacían excesivamente lentas y tediosas y hacia la segunda mitad del libro tuve la sensación de que no había valido la pena el esfuerzo que había puesto en tratar de entenderlo todo para un primer libro que no iba a resolver ni de lejos muchas cosas que había dejado en el aire.

A pesar de eso, el final sí logró dejarme satisfecha con todos los personajes, para mi sorpresa. No era en absoluto lo que esperaba y da un giro interesante a todos (sí, incluso a Lem). La batalla final de Maia y Wylar es especialmente trepidante, las escenas de acción de estos personajes han sido las que más me han gustado, aunque la de Nyx fue bastante interesante y me dejó con unas cuantas preguntas sobre qué estaba ocurriendo en ese lugar.

Conclusión

Es uno de los libros que me ha generado más contradicciones, así que vamos a ver los pros y los contras:

A favor

- El mundo es original e intrigante, diferente de muchos mundos de fantasía presentados y donde destaca la paleta de colores.

- Personajes grises pero coherentes con las circunstancias del mundo que habitan, lo que da lugar a decisiones, alianzas y traiciones interesantes.

- El ritmo es adecuado a la presentación y explicación de cómo es el mundo y su funcionamiento.

- Las escenas de acción son emocionantes y entretenidas.

En contra

- Es difícil empatizar con los personajes (si es lo que buscas en una novela).

- Hay partes que pueden resultar más lentas.

- Pese a que se resuelven las tramas planteadas, deja más preguntas que respuestas, lo que puede resultar frustrante tras el esfuerzo de haber entendido cómo funciona el mundo (dicho esto, es el primer libro de una serie, no sé si trilogía, bilogía o saga, por lo que es un rasgo bastante común).

Recomendación

A pesar de mis "peros" (que son por mi gusto personal), sí recomendaría la novela teniendo en cuenta que he disfrutado de leer algo diferente a lo que estoy acostumbrada y sobre todo por la originalidad del mundo que presenta (y porque me quedé con ganas de leer la segunda parte, creo que eso es un indicio definitivo). Eso sí, no la recomendaría a un lector principiante y creo que es mucho más interesante si has leído varios libros de fantasía y conoces los clichés del género.